La isla de Menorca, con sus 701,80 km² es la segunda isla de mayor extensión del archipiélago de las Islas Baleares. El nombre de la isla deriva de Minorica, en referencia a ser de «menor» tamaño que Mallorca, la isla más grande de las Baleares.
Menorca disfruta de un ambiente tranquilo y se caracteriza por pueblos y su paisaje rural, con grandes extensiones de prados separados por antiguos muros de piedra.
Este paisaje tranquilo y sencillo y el carácter pausado de los menorquines, han hecho merecedora a Menorca del apodo «la isla tranquila». La ausencia de grandes montañas y su situación geográfica, el punto más oriental de España, también la hacen merecedora del título de «la isla del viento».
Menorca y las Baleares
La isla de Menorca tiene sus propias particularidades y diferencias respecto del resto de las Islas Baleares. A pesar de su tamaño, que la sitúa en segundo lugar por extensión de las Baleares, no es la segunda isla más poblada del archipiélago, ya que está ampliamente superada en habitantes por Ibiza.
En cuanto a la orografía de la isla, los paisajes mayormente llanos son la principal característica que podemos observar. Su punto más elevado, el Monte Toro con sus escasos 358 metros, son un marca muy pequeña en comparación con las montañas de la Serra de Tramuntana de Mallorca que superan fácilmente los 1.000 metros. Una isla más parecida en tamaño, como Ibiza, tiene como punto más alto Sa Talaia, con 475 metros sobre el nivel del mar.
Las conexiones exteriores es uno de los puntos más complicados. Menorca no disfruta de una gran cantidad de conexiones aéreas, aunque en verano los vuelos se multiplican para facilitar la llegada de turistas. El aeropuerto, situado en las proximidades de Mahón, realiza conexiones con las principales ciudades de España y con Palma de Mallorca. Con esta última isla también tiene conexiones por mar, ya que los puertos de Ciutadella y Maó son importantes puertas de entrada.
El aislamiento que sufre Menorca por culpa de su escasa frecuencia de vuelos únicamente es superada por otra isla de las Baleares: Formentera, que no dispone de aeropuerto y cuyo único enlace con el exterior es el ferry que regularmente cubre el trayecto que une esta isla con Ibiza.
Las fiestas de Menorca
La isla puede presumir de disponer de algunas de las fiestas más auténticas y espectaculares de España.
Los protagonistas absolutos de estas fiestas son los caballos, cuyos saltos y carreras por el interior de los diferentes pueblos de Menorca sorprenden al visitante. Estas fiestas tienen un gran calado entre los habitantes de la isla