Las mejores zonas de Menorca

La isla de Menorca se ha mantenido hasta la actualidad muy protegida de la industria turística. Los menorquines han sabido velar por los mayores tesoros de su tierra y en la actualidad cuenta con una gran oferta de cultural y ocio que hacen que esta isla sea una de las más interesantes del archipiélago Balear. ¡Hay muchas cosas que hacer en Menorca además de ir a las playas!

Obviamente, visitar las fabulosas calas de color azul turquesa está entre los planes obligados de todo aquel que pisa esta isla. En este artículo repasamos las mejores playas de Menorca. Sin embargo, hay mucho más que descubrir en este paraíso mediterráneo. Te indicamos cuáles son las mejores zonas de la isla.

Zona de Maó (Mahón)

Mahón es la capital de la Menorca, y la población más cercana al aeropuerto. Merece la pena dejarse caer por aquí, los lugares imprescindibles a visitar son los siguientes:

El puerto de Maó

El puerto natural más grande de Europa y el segundo del mundo (después de Pearl Harbor). Se puede incluir alguna de las islas interiores del puerto si están disponibles (sobretodo Lazareto), o se puede hacer una excursión en barco por el interior del puerto (os explicarán donde viven los famosos). Este puerto es el motivo por el cual ingleses, franceses, romanos, cartagineses, árabes y españoles lucharon per Menorca a lo largo de la historia.

Isla de Lazareto

El Lazareto de Maó puede considerarse como una fortaleza sanitaria. Situado en una pequeña isla en el centro del puerto, su construcción se inició a finales del siglo XVIII bajo el mandato del rey Carlos III, aunque no se finalizó hasta principios del s.XIX con Carlos IV. Este monumento tuvo la función, desde 1816 a 1916, de control sanitario del tráfico marítimo que entraba en el puerto, en una época en la que la peste y otras enfermedades contagiosas eran comunes.

Su recinto está rodeado por un muro de piedra de unos siete metros de altura y está dividido en tres zonas; la primera, históricamente, estaba reservada para los tripulantes de los barcos con epidemia a bordo. La segunda albergaba a los navegantes que tenían enfermedades no infecciosas y existía una tercera donde iban a parar los barcos que llegaban a puerto con algún enfermo entre sus tripulantes.

En su visita podemos apreciar las salas y los instrumentos médicos que se utilizaban en el pasado en un pequeño museo de medicina.

Para llegar hasta la isla donde está el Lazareto de Maó, debemos tomar una embarcación que sale periódicamente de Cales Fonts.

  • La Fortaleza militar de la Mola (Maó): Pues eso, una antigua fortaleza militar (Excursión guiada 3 horas aprox.).
  • El Fuerte Marlborough (Es Castell): Fuerte de la época de la dominación inglesa.
  • Binibeca Vell (Sant Lluís): Una urbanización que parece un pueblecito de pescadores, con las calles muy estrechas. Es muy curiosa.
  • Parque Natural S’Albufera d’es Grau (Maó): Si queréis naturaleza (aunque de naturaleza hay casi por todas partes).
  • Faro de Favaritx (Maó): Uno del los faros mas conocidos de Menorca. Un día de tormenta las fotos quedan muy bien.
  • Cala Mesquida (Maó): Punto donde desembarco el ejército franco-español en 1781 para conquistar la isla. Los ingleses, después de conquistar la isla una década después, edificaron en este punto una torre desde la que se puede ver la Mola (una de las 11 torres construidas por las ingleses para proteger la isla).

Centro de Menorca

El interior de la isla de Menorca respira esencia mediterránea. Entre los muros de piedra seca y los caballos, encontramos auténticas joyas por descubrir:

Monte Toro (Mercadal)

La montaña más alta de Menorca (solo 357 metres). En un buen día se ve toda la isla (y hasta Mallorca) y se pueden hacer buenas fotos. Tiene un monasterio en la cumbre. Se puede subir con coche (tiene parking en la cima).

Fornells (Mercadal)

Un auténtico pueblo de pescadores (de langosta en muchos casos) con una bahía preciosa donde se puede comer bastante bien (recomiendo el restaurante “Es Pla” que tiene un menú muy bueno y extenso, por un precio que ronda los 25 euros por persona). También aquí se come la famosa caldereta de langosta, pero el palo en la factura es considerable (mínimo 120 euracos per pareja).

Cova d’en Xoroi (Cala’n Porter)

Bar-Discoteca metida en una cueva que cuelga sobre unos acantilados sobre el mar. Dicen que es el mejor lugar para ver la puesta de sol en Menorca (Yo creo que mejor desde una cala o desde es Castell de Sant Nicolau de Ciutadella, pero “para gustos hay colores”). La entrada por la tarde no es muy cara y “pinchan” música chill-out.

Taula Torralba (Alaior)

Por toda Menorca encontramos monumentos prehistóricos (megalíticos) de la época talaiótica. Entre ellos contamos navetes, taules, talaiots y poblados (en los poblados prácticamente no se ve nada). La taula más grande es la de Torralba, que se encuentra en Alaior (tiene unos 5 m de altura).

Es Barranc de Binigaus Vell y La Cova d’es Coloms (Mitjorn Gran)

Para disfrutar de la naturaleza e ir un poco de excursión, desde la playa de San Adeodato se puede entrar al barranco de Binigaus, donde encontramos la mayor cueva natural de Menorca, La Cova d’es Coloms, que tiene 24 metros de altura, 15 de ancho y 110 de profundidad.

Faro de Cavalleria (Mercadal)

Hay varios faros en Menorca, pero el de Cavalleria es posiblemente el más famoso. La vista al mar desde el acantilado es fantástica.

Montaña de Santa Águeda (Ferreries)

Entre Ciutadella y Ferreries encontramos la montaña de Santa Águeda. Es la segunda montaña más alta de Menorca (254 m) y tiene la curiosidad que en su cima se establecieron los romanos y los árabes (estos últimos con un fantástico castillo). Queda poco más que la vía romana, las ruinas del castillo y parte de una torre. Se llega a la cima en unos 45 minutos a pie.

La preciosa ciudad de Ciutadella

Antigua capital de Menorca (los ingleses la trasladaron a Maó por el puerto), Ciutadella es más monumental que Maó. La catedral, los palacios de los nobles y el antiguo palacio del gobernador (actualmente ayuntamiento) se encuentran en Ciutadella. Ciutadella es puramente mediterránea, al contrario que Maó, que te una apariencia más británica (por eso dicen que “Maó es burocrática y Ciutadella artística, que Maó tiene poder y Ciutadella estilo”). Algunos palacios se pueden visitar.

El Port de Ciutadella

Mucho más pequeño que el de Maó, este puerto es muy bonito para pasear y cenar (mirar precios antes de sentarse) y en el podemos encontrar una zona de bares y discotecas para disfrutar de la noche (en la dársena).

Castell de Sant Nicolau

Mas que un castillo es una torre de defensa situada en la entrada del puerto de Ciutadella. Su estado es muy bueno y es visitable. Desde el castillo hay una estupenda vista al mar.

Catedral de Menorca

Recientemente restaurada, la catedral de la isla no se encuentra en su capital, sino en esta población.

Casco antiguo de Ciutadella: Es un placer pasear por casco antiguo de la ciudad, incluida la calle más céntrica y comercial, “Ses Voltes” (Aviso, no hay ni Zara, ni Mango, ni nada por el estilo, jeje).

Naveta des Tudons

El monumento prehistórico más famoso. Se encuentra en la carretera Me-1 (la principal de Menorca) muy cerca de Ciutadella. El parking está en la propia carretera. No es espectacular, pero es considerado una de las construcciones más antiguas de Europa (1400 a.c.). Monumento funerario de la cultura Talaiòtica.

Líthica (Pedrera de s’Hostal)

Antiguas canteras de marés (roca con la que se construía antiguamente en Menorca y con la que se construyo la catedral, muchos palacios y muchas casas antiguas). Se han restaurado recientemente. En ellas se organizan conciertos y se graban anuncios publicitarios para la televisión.

La historia de las canteras de s’Hostal es curiosa. Por su situación es un inmejorable punto de vigilancia. Por ese motivo los romanos la escogieron como asentamiento militar. Más adelante, el reducto seria utilizado por los árabes, que construyeron un impresionante palacio de defensa. Aquí veraneaban los jefes moros junto a una corte de músicos, pensadores, poetas y artistas del mundo musulmán.

Cuando llegaron los cristianos, a les ordenes de Alfonso III, este paradisíaco enclave se convirtió en el último reducto de la resistencia musulmana en Menorca, que poco después se rindió sin presentar gran batalla. A manos de los cristianos, los jardines, las fantásticas torres y los pasadizos del castillo fueron abandonados con el paso del tiempo. La fortaleza fue destruida en tiempos de Pere el Ceremonioso

Barranco d’Algendar (Ferreries)

Naturaleza en estado puro. Se trata del mayor acantilado de la isla. Saliendo de Ferreries hacia Ciutadella, después de haber pasado el cruce de Cala Galdana (a mano izquierda) encontramos el cruce de Biniatram (1 km de Ferreries). Nos adentramos en este camino y llegamos al Barranco d’Algendar.

Una vez allí podemos estacionar el coche y continuar caminando. El paseo es precioso y se puede alargar tanto como queramos mientras observamos el impresionante paisaje.

Seguramente este listado con las cosas que hacer en Menorca se encuentre incompleto. Como todas las guías, los consejos están basados en opiniones subjetivas por lo que es muy posible que existan otros lugares no expuestos que te encantarán de la isla. Por lo tanto, el mejor consejo es que utilices estas líneas como referencia y te dejes perder en la isla para descubrir tus rincones favoritos.

¿Qué hacer en Menorca?

1. Disfrutar de calas de ensueño

Cala Talaier, Cala Morell, Cala Galdana, Cala Escorxada, Cala Tortuga, Cala Presili, Cala Pregonda, Cala Turqueta, Cala Mitjana, Cala Macarella y Cala Macarelleta, entre otras, son espacios para disfrutar de las aguas azul turquesa, de los parajes de ensueño y de la tranquilidad.
Si de algo puede presumir Menorca es de que todavía no ha sucumbido al turismo masivo. Lugares con un encanto especial para vivir las mejores experiencias de sol y playa. Algunas más reconditas, otras más accesibles, pero ninguna decepcionante. Entre pinos y acantilados, pequeños remansos de paz se abren para disfrutar de unas vacaciones inolvidables.

2. Contemplar sus perfectos atardeceres.

Observar en Menorca cómo el sol se despide por el horizonte es uno de los mayores recuerdos que tendrás de las
vacaciones. Estos lugares se sitúan en puntos estratégicos como los faros de Punta Nati, cerca de Ciutadella; y Cavalleria, en la localidad de Fornells. También son recomendables Monte Toro, el punto más alto de la isla, con 358 metros; el bar Sa Posta de sol, cerca de Ciutadella; la playa de Son Bou, junto a Alaior, y la Cova d’en Xoroi, en Cala en Porter, convertida en bar y el sitio más concurrido.

3. Recorrer el Camí de Cavalls

Para transitar por la isla en contacto con la naturaleza, la mejor opción es el Cami de Cavalls (Camino de Caballos), un sendero que bordea Menorca, es ideal para realizar a pie, en bicicleta o, como su nombre indica, a caballo. Perfectamente señalizado con paneles
informativos y estacas de madera, en el Cami de Cavalls descubrirás calas maravillosas, barrancos imponentes y pequeños bosques de pinos, además de visitar castillos, ermitas y casas de campo donde se elaboran algunos de los más típicos alimentos menorquines, como el queso mahonés.

4. Practicar actividades al aire libre.

¿Y Lo a gusto que se siente uno cuando, además de tomar el sol y disfrutar de la playa, se practica deporte? Si lo que prefieres es el mar, al norte, se puede alquilar un kayak en la bahía de Fornells; o al este, en la pequeña isla de Colom, frente al Parque de s’Albufera des Grau. Ambas están situadas junto paisajes y acan tocados espectaculares. Para practicar snorkel, nuestra recomendación está más al sur: Mahón, la isla del Aire o Binissafuller. Y si lo que te gusta es la bicicleta, nada mejor que recorrer Menorca de este a oeste en seis rutas de escasa dificultad y perfectamente señalizadas

5. Paladear su gastronomia.

Dos caracteristicas encierra la gastronomía menorquina. Una, la utilización en sus platos de productos propios de la tierra y del mar,
aprovechando aquellos de temporada; y dos, la herencia de las distintas civilizaciones y cul turas que la han poblado. Asi, entre sus platos más típicos se encuentran la caldereta de lan gosta (en la imagen), las berenjenas al horno y carbassonada, el oliaigua, los embutidos (con la sobrasada al frente), el queso y los vinos. De postre, nada mejor que saborear una pomada, combinado hecho con Xoriguer, la ginebra propia de la isla y limonada, acompañada con unos buenos rubiols de requesón, mermelada, chocolate o cabello de ángel.

6. Degustar su ruta del queso.

El queso menorquin, con Denominación de Origen, es uno de los productos más emble máticos y exportados al resto de España Europa Se fabrica en llocs, unas casas blancas aisladas rodeadas de fincas y prados donde pastan las vacas de las que se obtiene la leche para su elaboración. Sus edificios tienen una arquitectura tipica menorquina y en ellos se guardan los secretos de este manjar lácteo. Santa Catalina, Coinga, Subaida, S’Arangí y Hort de Sant Patrici son los productores más representativos de una de las industrias más importantes de la isla.

7. Admirar las casas señoriales de Ciutadella.

No es la capital de Menorca, pero sí la que cuenta con mayor número de habitantes. Ciutadella es una joya en piedra, ya que este material inunda las calles, edificios, iglesias… Alzar la vista es toparse con majestuosos palacios y casas señoriales que son historia viva de la isla. La mayoría se construyeron entre los siglos XVII y XIX, bajo dominación de la corona inglesa. época en la que nobles y terratenientes hacían valer su poder económico y social. Hasta octu bre se puede visitar alguno de esos palacios,como Can Salort o Can Oliver, junto a la cate dral, y admirar esos amplios vestíbulos, con jardines interiores y elegantes escaleras.

8. Caminar por el centro histórico de Mahón.

Al llegar en barco a la capital de Menorca se aprecian los restos de murallas medievales y casas con miradores de estilo inglés. Una ciudad con huellas arquitectónicas francesas, inglesas y españolas en cada calle y edificio. El recorrido puede comenzar en la iglesia de Santa María, construida en el siglo XVIII sobre otra de estilo gótico, donde destaca su monumental órgano, obra del maestro suizo Juan Kiburz; continuar por el Teatro Principal (1829), la iglesia del Carmen, junto al claustro del mismo nombre y que acoge un mercado de productos menorquines, y finalizar entre las casas señoriales de la calle Isabel Y el pelado de Can Oliver, transformado en centro de arte.

9. Apreciar el arte de la defensa militar.

Como enclave estratégico del Mediterráneo numerosas construcciones de la Isla estaban destinadas a proteger a puebla- ción. El Fuerte Marlborough junto al Castillo de Sant Felip, la torre de Stuart y Fortaleza de La Mola (en la foto), salvaguardar el puerto de Mahón. Desde el siglo XIX, los buques proceden test de África debian desembarcar en la fortaleza sanitaria de Llatzaret para pasar la cuarentena Otras defensas militares son la Torre de Fornells, una de las más grandes de la isla, que servia para proteger el puerto natural de Fornells y el castillo de Sant Antoni Las murallas y torres de Sant Nicolau y den Quart, en Ciutadella, la torre de Punta Prima (Sant Lluis), y la torre Atalaya en Monte Toro (Es Mercadal), entre otras.

10. Descubrir el puerto de Mahón

El segundo fondeadero natural más grande del Mediterráneo. A lo largo de la Historia, sus seis kilómetros de longitud lo han con vertido en un enclave codiciado por muchos pueblos, ya fueran fenicios o cartagineses en la antigüedad, o ingleses, franceses y espanoles más recientemente En 180 fue entregado definitivamente a la corona española, no sin seguir siendo un lugar anhelado por otros países No solo es espectacular entrar en barco
a través de ese enorme canal natural a suave dedo, se congrega el mayor foco turistico de la isla, repleto de terrazas, restaurantes y sitios donde salir a tomar algo.

3 consejos especiales

1 – Pasa un día de playa en Cala Macarelleta y disfruta de la tranquilidad de un baño en un enclave único.

2 – Prueba todos los sabores de la isla en el mercado del Claustro del Carmen, en Mahón, uno de los espacios gourmet más apreciados.

3 – Visita el poblado talayótico de Torelló, uno de los más extensos de Menorca y patrimonio cultural arqueológico.

Ocio nocturno

El espíritu alegre y distendido de los menorquines parece no tener límites y las juergas nocturnas en Menorca se alargan a menudo hasta el amanecer. La mayoría de las localidades turísticas gozan de una marcha libre y minimalista como ninguna, toda una revolución respecto a otros lugares de España. Las comidas se toman con mucha calma y el café y el coñac son siempre una buena excusa para alargar la sobremesa. Aún así, siempre es posible encontrar otro tipo de locales para el que le hierve la sangre en las venas, sobre todo en la zona del puerto, donde se concentran los bares de copas más animados.

Por cierto, si quieres pedir una de las copas típicas de la isla, no dejes de pedir Gin Xoriguer, la ginebra más consumida en Menorca, lugar donde se produce. Los menorquines la acostumbran a beber con refresco de limón y es conocido como pomada, aunque en la zona oeste de la isla lo llaman simplemente gin amb llimonada.

Cova d’en Xoroi

La Cova d’en Xoroi es una cueva natural que se ha remodelado y se ha convertido en un bar de copas increíble. Gracias al escenario en que se encuentra la Cueva del Xoroi es, por sí misma, un auténtico centro turístico, incluso en sus noches más tranquilas. Ponen muy buena música y es un buen lugar para bailar.

Nou de Copes

El Nou de Copes se encuentra en la Plaza de España 9. Es un bar pequeño pero muy a la moda. Tiene forma de cueva, excavada en las antiguas murallas del puerto.

Mambo des Part

El Mambo des Part es un bar de copas muy conocido, situado en el Anden de Llevant 209.

Akelarre

Akelarre es un bar muy a la moda entre los más jóvenes. Está situado en el Moll de Ponent 41-43. Ponen buena música de ambiente y jazz hasta altas horas de la noche.

¿Cómo desplazarse por Menorca?

El transporte entra las diferentes localidades de Menorca no es nada complicado. En los núcleos principales, como Mahón y Ciudadela (Ciutadella) los lugares más importantes se encuentran bastante cerca unos de otros, así que resulta muy cómodo andar de un sitio a otro. Además, no hay que olvidar que caminar es un ejercicio muy sano.

Menorca cuenta con muchas zonas peatonales para facilitar las cosas a los que prefieren caminar, ya sea para hacer ejercicio, para pasar el rato o para ahorrar unos eurillos. Eso no quiere decir que la isla no disponga de otros muchos medios de transporte.

Bus

La estación de autobuses de Menorca se encuentra en Mahón. Este medio de transporte resulta muy práctico a la hora de recorrer las diversas localidades de la isla gastando poco. Los autobuses salen de la Calle José Anselmo Clave, en el centro de Mahón, y son, en su mayoría, de color naranja y de un solo piso. El destino más popular (con siete autobuses diarios durante el verano y cuatro en invierno) es Ciutadella, pero también existen otros muchos destinos a lo largo y ancho de la isla.

Puedes coger un horario de autobuses en la oficina de turismo más cercana o puedes consultar las salidas en el periódico local (Diario Insular de Menorca) y los billetes se compran directamente en el autobús. Es conveniente consultar los horarios con antelación para poder hacer bien los planes, ya que los fines de semana el servicio es más reducido.

Taxis

Desde el aeropuerto de Menorca sólo se puede llegar a Mahón en taxi, ya que no existe ninguna línea de autobuses que cubra el recorrido. Por supuesto, no resulta complicado encontrar un taxi que te lleve hasta Mahón. Las tarifas están controladas por el taxímetro y precio del trayecto del aeropuerto a Mahón suele ser de unos 12€. Sin embargo, hay que tener en cuenta que en algunas ocasiones se puede imponer un suplemento según la hora del día, el equipaje o el número de pasajeros.

Scooter

En todo Menorca los scooters son todo un éxito entre los jóvenes. En Mahón hay varios sitios en los que se puede alquilar un scooter para moverse por la isla de la forma más a la moda. No sólo es una forma divertida de visitar la ciudad, también es una de las más baratas. Además, es mucho más cómodo, sobre todo cuando te adentras en las callejuelas estrechas de la ciudad.

Coche

El coche es el medio de transporte más cómodo para recorrer la isla, aunque es mejor evitarlo en la medida de lo posible dentro de la ciudad ya que el tráfico es bastante complicado y puede resultar bastante cansado conducir por las callejuelas estrechas. Además, también te puedes encontrar con problemas de aparcamiento. Sin embargo, si quieres descubrir los maravillosos paisajes de Menorca a fondo y a tu aire, el alquiler de coches es la mejor opción. Hazte con un buen mapa y ¡carretera y manta!